29 marzo 2006

EL TORERO Y EL TAURINO

EL TORERO Y EL TAURINO
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Tribuna de Salamanca

La mejor serie de televisión que se ha hecho hasta ahora sobre el mundo de los toros la dirigió Jaime de Armiñan, porque Juncal nos enseñó muchas cosas del interior del mundo del toro que como todo lo bueno sale del alma de aquel espléndido personaje al que puso cuerpo Paco Rabal. De entre todo lo que nos mostró la serie hay algo que se debe aprender porque ayudará al neófito a comprendernos mejor: La diferencia entre un torero y un taurino. El torero es un torero, bueno, es un hombre pero distinto a los demás mortales, tanto que asume el propio grado de divinidad helénica debido a que es por definición un vencedor de la muerte y ya se sabe que a la muerte solo la vencen los dioses. El taurino es uno que está alrededor. Alrededor del torero, del ganadero, del empresario. Alrededor de todo y de nada. Que igual complementa lo que el matador hace en el ruedo, por ejemplo vendiendo en los despachos las obras y milagros de su matador, o que igual se lo carga si no sabe entender el alma del dios. Y el taurino además lo es todo, está a caballo de todo lo que se menea, tenga color a dinero y olor a toro. El taurino suele ser uno que no ha llegado pero que se quiere quedar dentro. Y aveces se queda sin entender al maestro porque de los dos el que más vale, es el que se la juega en el ruedo poniendo en valor su carrera. El otro puede engrandecerla o hundirla. Verán, Juncal es un torero venido a menos, pero no es un taurino. Es un alma limpia y honrada y todo lo que es le sale de dentro, tanto que el hombre vive en la piel del torero y los dos son uno. El que hay alrededor, jamás puede vivir lo que ha vivido un torero sencillamente porque no alcanzó el grado de la divinidad, y aún cuando aquel se vistiera de luces, no llegó a hacer tantos milagros.
Leí a Cañamero sobre Juan Diego en Alba de Tormes. Juan Diego es un torero que debe seguir su camino hacia la divinidad y alejarse de los taurinos. Ya ha perdido mucho tiempo y nos ha hecho perder a los aficionados muchas tardes mágicas.
Después de Valencia, los taurinos venderán bien el triunfo de Fuente Ymbro. El indulto es un valor en tauromaquia que se sabe vender bien sobretodo en los tiempos que corren. Tiempos de devaluación de valores, vueltas, orejas, rabos. Por eso ese otro premio mayor, el del indulto, se ha convertido en otro nuevo valor, más publicitario que justo. Pero en el muestrario del taurino ya tiene otra cosa más para vender. Que se aproveche el ganadero, que lo haga con honradez, porque la gloria no dura siempre.
También venderán los taurinos el triunfo en Bilbao de Javier Blanco, y lo que son las cosas, a lo peor lo hacen con menos muestrario que cuando triunfa un torero consolidado en plaza tan de primera, pero se equivocarían pues precisamente es a los nuevos valores a los que hay que vender más y mejor. Javier Blanco tiene un tiempo corto en esto, pero para forjarse un alma de torero, de hombre tocado por los dioses es bueno que sea despacio para que los taurinos lo entiendan y lo vendan bien.
Por último debo decir que los taurinos se han quedado anonadados al saber que los políticos sevillanos, cumpliendo férreamente con la cuota femenina que tan de moda se ha puesto ahora en todos los ordenes, han nombrado presidenta del palco de la Maestranza a Anabel Moreno bajo la justificación de que están (en Andalucía) en una etapa de renovación de personas. Sin embargo para un torero esto no es problema, porque un torero ama a una mujer más que a nadie, después del toro... y si no que se lo pregunten a Juncal que si pudiera resolvería la faena en un brindis después de haber tomado nota:
"ea ma legro de brindaale a osted, so cuerpo, a osté y a la compaña de osté, y a toa la sangre de osté y de la e su retrechera mare y ahora voy a matá eze toro pa que luego osté y yo, lo do uunto, selebremo la orejaa que me va da osté"

23 marzo 2006

ALEA JACTA EST

ALEA JACTA EST
Por Agustín Hervás

La suerte está echada. Ahora esperamos que el reglamento taurino de Andalucía se publique, pero ya todo está consumado. Más allá de las valoraciones que hemos venido haciendo desde que supimos el interés del gobierno andaluz por meter mano en lo taurino para captar a este sector de votantes, hemos de convenir que esto es lo que hay aunque no nos guste. Los servicios de propaganda del partido se han cuidado muy mucho de explicar el contubernio bajo ley que se nos viene encima, pero estoicamente algunos seguiremos protestando:
.- Los indultos en las plazas de tercera categoría porque en ellas se cometerán las mayores tropelías, incluso, aviso, el de erales. Los malos consejeros han soplado a las orejas de Evangelina, la Consejera de Gobernación, que si ya se estaba haciendo de tapadillo, que mejor seria darle carta de naturaleza. De igual manera como todos hablamos por el móvil conduciendo, ¿porqué no lo legalizan?
.- La no observancia de que los animales indultados padreen en las ganaderías y la posible dejadez sanitaria del ganadero por si se le ocurre, una vez obtenida la publicidad del momento, dejar morir al toro.
.- Los festejos mixtos y raros, raros, que se nos vienen encima, con matadores que no quieran matar los toros para que los indulten y que usan muletas blancas, llevando este espectáculo al que preconiza Távora, de la tauromaquia moderna.
.- Las decisiones erróneas de la empresa de Málaga que si ya no eran las idóneas para una plaza de segunda, menos lo serán para una de primera. Al Marqués de Fuengirola le falta caché para mantener una plaza de tanta categoría y la vigilancia será férrea a favor de que su billete chico, no compre principios grandes para ir en contra del billete grande que pagará el espectador a quien no se le protege en este reglamento. De cualquier manera yo no sabía que los malagueños estaban traumados por no ser de primera y quizás por ello, los psiquiatras políticos nos la han calzado.
.- En contra de los sospechosos nombramientos para presidentes por amiguismo con los delegados de gobierno y alcaldes, que con sus nombramientos procuraran la parcialidad bajo el prejuicio que se ocasione al mantenedor de la fiesta que no es otro que el aficionado. Que la única limitación para sus nombramientos sea la de no tener intereses, se entiende económicos, en la fiesta no es razón para que un presidente seglar no caiga en la tentación de tenerlos cuando sea nombrado.
.- Con ahínco elevaremos la protesta, a la decisión política de relegar a la verdadera autoridad, a los policías, a cuidar de los callejones con el solo objeto de poner el alcoholímetro a los borrachos que por el pululen, transeúntes que ¡oh contradicción! habrán sido autorizados por los que los han quitado del palco, los mismos que nombran a los presidentes. ¡Cuanta bajeza y oprobio para un cuerpo, el de la policía nacional, al que ningún sector ha reconocido sus históricos servicios aún con sus errores! ¡Pues como todo el mundo!
.- Que no se piquen los toros, porque en algunas plazas de segunda y tercera veremos como la suerte de varas ya no será necesaria, habiendo conseguido los matadores el protagonismo que ellos querían en las decisiones con respecto a su toro. Será más fuerte la protesta cuanto más se equivoquen.
.- Que no haya broncas para los presidentes amiguistas.
.- El lío que se montará con los avisos. Que si a los tres minutos de los siete de los diez el primer aviso o cuando se entre por vez primera a matar a los tres minutos el primer aviso, más tres más el segundo más dos más el tercero y definitivo. Y si como opina la resistencia granadina a un matador le da por no pegar un pase. ¿Qué hacemos?
.- Los toros afeitados que salgan a la plaza ahora bajo la responsabilidad del ganadero. Entonces se podrán pedir responsabilidades jurídicas al ganadero y al presidente seglar por permitir el fraude de ley.
.- Que los presidentes y veterinarios hagan de empresarios reseñando las reses en el campo, minimizando sus responsabilidades para con el aficionado.
.- La concesión de las orejas que deberían haber sido prohibidas.
Que sean malos tiempos para la lírica y que este no sea el espectáculo que queremos algunos aficionados no quiere decir que no amemos la fiesta brava. Al toro sobre todo, y por el toro, todo. Por eso siempre hablaremos y escribiremos en su favor. Desde la critica para construir y por el respeto al animal más maravilloso de la naturaleza.
La afición debería tener en cuenta que hay sectores de taurinos, y de profesionales, como quedó patente en el ultimo programa de televisión española dedicado a esto de los toros, que no aman a la fiesta, que no quieren defenderla, que como bien dice mi amigo David Plaza, solo quieren vivir de ella, por eso luego no tienen argumentos filosóficos para defenderla y claro los animalistas se los comen por los pies.

20 marzo 2006

DIARIO DE LA RESISTENCIA: Un majaillo

DIARIO DE LA RESISTENCIA: Un majaillo.
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Tribuna de Salamanca

De Antonio Bienvenida hay recuerdos en la resistencia muy cabales, por ejemplo aquella aventura de atreverse a denunciar públicamente el afeitado de los toros en aquellos años 50 que a él le reportó prestigio entre la afición pero odio entre sus compañeros, Julio Aparicio sabe de aquello. Más luego las cosas vinieron a su cauce y más tarde todo cayó en sacos de borrajas pues aún no hemos acabado con ese terrible fraude, que ya es reconocido abiertamente por los mismos toreros que sin pudor elevan el caso a la mayor diciendo que lo que está mal es que le saquen punta a los pitones. Pero la gravedad mayor del asunto es consecuencia del visto bueno que las autoridades, si es que las hay en la actualidad, consienten el fraude.
Esa honestidad que Antonio Bienvenida atesoraba se ha perdido y los toreritos del momento no tienen lo que hay que tener entre las piernas para primero ser hombres y luego ser toreros. Antonio sabía estar en la plaza como director de lidia, se afanaba en ejecutar el toreo puro y de calidad y lo que hacia, dentro o fuera de los ruedos lo hacía con señorío. Lo hacia tan bien y tan bonito y con tanta elegancia que parecía que en el toreo todo era fácil, cuando en realidad era todo lo contrario.
.- Cuando toreábamos de salón – comenta el Maqui – todos queríamos imitar a Bienvenida. ¡Que forma de mandar a las cuadrillas! ¡Como los situaba en el ruedo! sin dar un grito, solo ordenando con la mirada.
Los resistentes se han puesto nostálgicos, les ha dado por pensar en la fiesta en la que una vuelta al ruedo era un triunfo en comparación con esta que nos legó Joselito, ¡perdón Alfonso! Pepito Arroyo, que instauró la vuelta al ruedo con una oreja. Nos ha dado por recordar a aquel toro bravo, encastado, con fuerzas, que aguantaba la lidia sin enterarse. Hoy no existe y si existe no se sabe dónde porque los toreros no lo quieren. Hoy sólo existe ese torillo bobalicón, sin emoción. Aquel que el lumbreras de Juan Pedro denominó "toro artista". Aquella familia que vendiendo desechos de tentaderos ha conseguido manipular la fiesta económica y genéticamente.
.- La culpa es de unos y de otros malos ganaderos, malos empresarios y sobre todo de las mal llamadas figuras del toreo del hoy en día que huyen del toro encastado y con trapío y quieren el que no le dé problemas.
Este resistente tiene la voz enronquecida, me dice que debe ser del temperamento y yo intento corregirlo y señalarle que será por el tiempo y a duras penas, con un ímprobo esfuerzo de garganta me dice que no, que es del temperamento. Y yo dudo.
.- Joder que he dicho que es del temperamento!!!
Claro, por como lo ha dicho que debería sonar como a voces, entiendo lo del temperamento, yo me callo y él prosigue:
.- Joder, - mirándome con cierto desaire -, todo lo contrario, al toro con casta no lo quieren y en cambio sí se pelean por la tonta del bote ¡A donde ha llegado la fiesta nacional que a partir de Abril pasará a llamarse fiesta regional!
Se habla de que los políticos no financian la fiesta, ni nada, cuando ponen dinero es para sacar votos y en poniéndolo no le hacen favor al toreo porque las rapiñas buscan el provecho y no la proyección de la fiesta. Que por eso está ahora como está, por el intervencionismo de la administración, primero con subvenciones y luego con reglamentos, cuando no influyendo para que las plazas caigan en manos de recomendados que de esto no saben.
Hay entre los resistentes de esta trinchera una honda preocupación que no obedece más que a los dictados de los políticos. Todos somos conscientes de que el espectáculo que se nos está ofreciendo es un espectáculo adulterado, moderno dicen, en el que se ha pasado de aplicar autoridad al exceso de crueldad, a admitirla o a suprimirla por ley, y por eso el reglamento que está por venir. Es lo que se está llamando entre la cursilería taurina, "La Corrida Moderna". Igual, igual que lo que Salvador Távora está preparando como su próximo espectáculo, mostrarnos bajo el signo de la cultura ese nuevo proyecto que como contubernio los sectores taurinos denominan moderno. Un espectáculo en el que no haya tiempos muertos, que aburren al que no entienda, que todos sean protagonistas para darle a la corrida otra identidad y para que – he aquí la magna idea de las mentes pensantes – el toreo a pie y el de a caballo – no se dice por los picadores sino por los rejoneadores – suponga un reencuentro. ¡Miedo nos da este asunto de la corrida moderna!
Se habla con tristeza de las vicisitudes por las que ha pasado la fiesta, que ha convocado a la resistencia, hasta llegar al dominio de personajes insaciables y sin pudor, se recuerdan casos verídicos y desgraciados que mediatizaron gerencias de empresas, y se comenta el provecho que ciertos buitres han sacado siempre del control de las taquillas.
Alguno de los resistentes piensa que gran parte de los males que aquejan a lo de los toros lo tiene la prensa, que de una parte a estas fechas es muy mediocre, porque no se hace buena literatura taurina y los medios no hacen buena prensa taurina. Que ha habido épocas por puñados de toreros, pero que ahora mucha escuela y mucha tontería pero no tenemos a nadie que merezca la pena. Salió el nombre de Javier Conde pero de broma y los resistentes se carcajearon, porque claro, uno se acordó de la muleta blanca.
.- Esto es la historia. Cuando había un majaillo de aficionados en las plazas de toros se alimentaba la emoción, se aplaudía la brevedad del matador para que no se pusiera pesado y se estimaban las vueltas al ruedo sin orejas, y en los tendidos había sabios que eran respetados siendo escuchados por los neófitos que oían veían y leían y no ahora que si los sabios comentan los tratan de mala manera. Fijaos como era la cosa entonces que el bajonazo que pegaba Antonio Ordoñez se le llamó con arte, estocada en el rincón de Ordoñez, y lo que son las cosas de este maestro que como torero fue un monstruo pero que como persona había que echarle de comer aparte.
.- ¡Pues como empresario ni te cuento! Lo era de la plaza de Fuengirola y dio orden a los porteros que entonces comandaba la casa Bernal de que no entrara nadie de gañote y lo común, entro su mujer y el doctor Zumel y cuando Bernal y Ordoñez fueron a ajustar cuentas se lo reprochó al portero y este con las venas disparadas en el pescuezo se fue y nunca jamas le sirvió de taquillero. Era agarrado.
La resistencia antes de despedirse y repartirse a sus trincheras; En esta tibia noche malagueña, preludio primaveral, por el que en estado de explosión andan las hojas nuevas de los árboles, renovando el milagro de la vida que un día de otoño fue muerte, cuando las que llegaron a ser cobrizas se arrojaron a sus pies; alienta a las autoridades (presidentes y veterinarios) de la plaza de toros de Valencia para que sean exigentes con el ganado y con la organización de un espectáculo caro y elitista de una plaza de toros de primera categoría. Que las exigencias nunca son malas para la fiesta, lo son para los que no la entienden como regeneración de vida y alegoría de la muerte, que las exigencias en este negocio que lo es de "vida y muerte" deben ser más porque en este espectáculo se muere de verdad.

13 marzo 2006

DIARIO DE LA RESISTENCIA: El Tiovivo

DIARIO DE LA RESITENCIA: El Tiovivo
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Tribuna de Salamanca

Caen chuzos de punta en el barrio de la Malagueta, la plaza avejentada por la pálida luz de la tenebrosa noche se yergue sobre un racimo de vallas, tuberías y maquinaria a estas horas parada, que hirieron durante el día la milenaria tierra que pisan sus cimientos. Es triste este invierno, no porque sea más frío para ti, sino porque las cuchillas de acero laceran tu rostro para que a la luz de la primavera aparezca en tus entrañas un parking y a tu vera un parque.
Ese pelotas oficial al fin; tristemente novillero en el recuerdo de algunos, que calza zapatos grandes y al que el ingenio malagueño apodó el zapatones, no solamente cultiva el arte de la gratuita adulación hacia el cáncer de La Malagueta el ínclito Marqués de Fuengirola, sino que además toca el violín en feria, arte nada despreciable que cual bufón de la corte acompaña en breves pero intensos pizzicatos las bárbaras ingeniosidades del, por el orgullo ennoblecido, Martín Lorca; se ha salido con la suya, que no es otra que el haberte conseguido conquistar de tus centenarios corrales el espacio que mañana se dedicará al encierro de los coches y al apartado de las Chachas y de los niños. El ilustre zapatones, no se conforma con sacarle brillo al orgullo del Marqués, sino que además se declara abiertamente su mozo de espadas.
El Quinto Columnista, uno de los miembros más activos de la resistencia da cuenta de un plato de Quisquillas y de un buen baso de vino de Vega Cubillas. Me tiende su mano calentita y me ofrece un vaso. A fe que está rico el vino y el marisco, los calamares y las aceitunas. Sigo prefiriendo las de Jaén, pero después de veinte años que me mudé, paso bien las de con estos aliños.
Van llegando los miembros de la resistencia, todos con frío, y en los abrigos la escarcha, si Málaga estuviera cien metros más alta, nevaría.
La contrariedad en la resistencia es manifiesta, el empresario ha anunciado ya las ganaderías para la feria que con un poco de mala suerte será la primera en una plaza de primera y para tales fastos ha comprometido ya, ganaderías de segunda, menos la que fue triunfadora el pasado año. Fuenteymbro no vendrá porque el yernísimo del marqués no quiere pagarle los once millones de pesetas que pide el ganadero. En Málaga se tiene por costumbre no traer de un año para otro la ganadería triunfadora. En vez de premiar se castiga. Es lo que pasa con el billete chico de este empresario. Y además Gallardo que estaba dispuesto a, en ferias sucesivas, suministrarle más corridas al mismo precio, ha visto su idea de marketing despreciada. Que se sepa hay un ciudadano contento con las ganaderías apalabradas, el aspirante a presidente, Ildefonso del Olmo, le gusta la del Marques de Domecq y las malas lenguas dicen que viene porque es capricho de este político que se ha quedado sin partido (PA) en la capital.
Philbi dice que Soriano ha estado en Granada y que allí, dejado llevar de su innato talento taurino, ese que ha mediatizado todo el espectro de taurinitos andantes y galopantes, ha dicho cosas como que el reglamento está en periodo de Consejo Consultivo y que si todo va bien, -frase copiada a la derecha política española- saldrá publicado en el BOJA en el mes de abril, para la feria sevillana. El Quinto Columnista insiste en la comparativa de ganaderías de las ferias malacitana y sevillana, supuestamente las dos plazas de primera, y hace ver a los miembros de la resistencia, la poca categoría de las corridas, todas de sangre Domecq, que acuden a nuestra ciudad, mientras los sevillanos disfrutaran de varias corridas con el toro, toro. ¡Y Soriano vendiendo la burra por ahí! ¡Y qué burra! Dice que la fiesta no debería tener color político y no cae en la cuenta que su color se ha metido hasta los corvejones en ella, según el Maqui, para buscar votos.
.- Los políticos son el mal de la fiesta –levantó la voz –
Uno de nuestros espías viene diciendo que este político cordobés ha dicho que este reglamento andaluz se pone en marcha por algo que ha denominado Innovación y que la resistencia no alcanza a saber muy bien si esto tiene algo que ver con ese termino que ahora se lleva tanto que dice algo así como I+D o como dijo el otro "tira tu palante que nosotros te seguimos" y el que lo dijo, que dicen que es colega de Soriano pero en los madriles, se quedó tan ancho y tan pancho. No contento con esta sarta de perlas y lejos de mostrarse cauto este joven político socialista soltó la que nos dejó a todos patidifusos y es la de las presidencias profesionalizadas. Al unísono todos los miembros de la resistencia convinimos en carcajadas y decidimos opositar a las plazas de presidentes pues si profesionalizan se cobra y nuestro contable, mas pronto que tarde preguntó:
.- ¿Y quien va a pagarles?, ¿la administración o el empresariado? ¡Eso faltaría ya para el duro!
Pero hubo más ante el asombro de los resistentes, Soriano insiste que este será un reglamento participativo que dará cabida a espectáculos futuros no existentes ahora, y claro por pensar e imaginar un espectáculo futuro puede ser Conde, la mujer y el suegro y los niños de aguadores o ese otro que a mi ya se me había ocurrido pero que tito Álvaro fue más rápido que yo al proponerlo y llegó a decírselo antes al defensor del reglamento, que no es otro que el de quitar a los picadores y poner a rejoneadores. Y así una detrás de otra las explicaciones de que el matador cambiará el tercio de varas ya que mandará en el numero y en la intensidad, que no será competencia exclusiva del presidente la concesión de la segunda oreja, el indulto generalizado, hasta llegar a una de las cosas más positivas que tendrá la norma, la de la participación ciudadana, designados por las peñas, de estar en el sorteo, algo que propuso el ex presidente de La Malagueta Fernández Torres hace un porrón de años y que se ha venido haciendo en algunas ocasiones en la plaza de Málaga.
Sin embargo los resistentes no se imaginan pese a que esfuerzo hacen para ello, cómo Soriano piensa eliminar lo de pagar por torear, cómo con esta, según el, renovación a la que está abocada la fiesta va a atraer a gente joven a las plazas de toros y cómo va a obligar a los estamentos de la fiesta a impregnarla de sensación de riesgo. Lo bueno de esto último es que Soriano admite que en la actualidad nuestros espectáculos de toros están ayunos de lo más elemental para la emoción que es el riesgo, y en admitiéndolo en lo escrito no se dan pasos para subsanarlo ya que los resistentes opinan que no basta solo con reconocerlo y enunciarlo.
Después del esfuerzo realizado en Granada, José Antonio Soriano desveló el enigma primario de los problemas de la fiesta y lo enunció como sigue, cosa para la que nuestro espía, bajo secreto sumarísimo nos confesó que había necesitado un encerado, dijo así: el problema en la fiesta no son los antitaurinos sino los mismos integrantes de la fiesta. Y descansó.
La reflexión que hace la resistencia es una reflexión profunda. Sabemos que nuestra labor no solo es la de luchar durante el día en las barricadas y en las trincheras que cavamos durante la noche, sino que además en el riesgo de nuestras vidas está la defensa de una fiesta que amamos en la pureza y no en su adulterio. La política, la sociedad y la economía de este negocio se mueven en unos terrenos faltos de identidad, de honor y de palabra, ya las manos no se chocan sintiendo el calor de la honradez o el frío de la traición. Una pluma, es más, un ordenador, media entre el corazón y el oficio más peligroso y emocionante del mundo. A la fiesta le falta identidad y hemos de plantearnos qué fiesta queremos, qué teníamos, qué tenemos y a donde vamos.
El superintendente de la resistencia ha confesado su pesimismo.
.- Esta que quieren darme no es la fiesta que yo quiero, que yo he mamado y con la que me he emocionado. Por eso terminaré yéndome de ella si la resistencia no triunfa. Los políticos lo que quieren es crear una fiesta nueva adulterada, quieren que se acabe la que había, quizás por motivos de sensibilidad europea, pero esa no será mi fiesta. Yo no quiero una fiesta como la que Garci pinta en su película de El Tiovivo. Un hombre vestido de torero impecablemente hace el paseíllo en la pista de una sala de baile a donde sale un hombre vestido de toro al que incorpora un artilugio para que el torero clave allí un par de banderillas, y tras de una faena brillante mate al toro que indefectiblemente cae patas arriba. El torero da la vuelta al ruedo en olor de triunfo. Punto y final. Se acabó la corrida con la gente bramando desde sus asientos bebiendo cava, vestidos de etiqueta.
Un veterano guerrillero que forma parte de otra trinchera quisiera volver a recuperar el espíritu del tendido 6.
.- Yo volví a los toros por el seis
La resistencia tiene el deber moral, también, de ayudar a recuperar ese espíritu combativo y de entrega a la verdad de la Tauromaquia. Hay gente en la resistencia que incluso pudieran ser presidentes de las plazas de toros y comandantes de otras trincheras con lo que la resistencia sería cada vez más fuerte y quizás, a caso, temida.

08 marzo 2006

SOBRE LA AUTORIDAD

SOBRE LA AUTORIDAD
Por Agustín Hervás

Hay un criterio que vengo haciendo publico desde hace ya varios artículos relativo a la autoridad en el palco. Como se sabe los presidentes de los festejos taurinos, históricamente, primero por petición de los propios intervinientes en el espectáculo y segundo por el propio interés de salvaguardar los intereses del publico, son agentes de la autoridad, es decir de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, hasta que llegó la ley Corcuera en la que se admitía en las plazas de tercera a los presidentes civiles. Lo que sostengo hasta que la cosa no se regule como Dios manda, si es que en estos tiempos manda algo, es que las personas que "per se" están revestidas por razón de oficio de autoridad, están más legitimadas para salvaguardar el interés del publico que aquel, al que yo llamo presidente seglar, que no tiene ni las atribuciones ni el poder operativo de ejercerla con garantías suficientes de no ser contaminado por el taurinismo pícaro.
Escrito esto debo decir que no defiendo a ultranza a los policías en el palco. Pues algunos que conozco, son autoridad pero no son aficionados y de igual manera se contaminan de la sinvergonzonería campeante entre la taurinidad, con lo que tanto daño hacen los seglares como los policías no aficionados a la fiesta, cada vez que usurpan los criterios de verdad que en ella se deben mantener. Caso último el del presidente de Motril que siendo policía, se abocó al contubernio del indulto de un toro manso.
Creo que viniéndosenos encima como senos vendrá el reglamento andaluz para la feria de Sevilla, sería muy conveniente regular las presidencias – policías o seglares – en cursos preparatorios impartidos en colegios donde la teoría de lugar a la practica y de aquí al titulo reconocido, digamos como los árbitros de fútbol, para poder actuar en festejos taurinos, no ya solo de la localidad sino también fuera de ella o donde se requiriera.
Los taurinos y la prensa pagada siempre han intentado menospreciar a la autoridad policial en el palco argumentando que ya los tiempos de Franco pasaron y que en una democracia no se los puede tratar de delincuentes, cuando en realidad nunca nadie los trató así, los mismos taurinos se descalifican cuando bajo el argumento de la autogestión, lo que han conseguido es un presidente moldeable, un toro elegido en el campo por la autoridad veterinaria y presidencial haciéndole el juego al empresario, ejemplo del paso año en Sevilla, y un torero comodón. Claro que cuando algunos argumentamos esto y un toro le da una cornada a un torero, los plumillas comprados nos arrojan los tomates de la incomprensión pues según ellos, aman, por dulcificarla, más la fiesta que nosotros, por exigirla.
Y sobre todo este embrollo, saben lo que pasa, que entre políticos y taurinos están cambiando el espectáculo, luego algunos debemos preguntarnos: ¿realmente esta es la corrida que queremos?. Por favor no hagan el chiste fácil.

06 marzo 2006

LOS JORNALEROS DE LAS VENTAS

LOS JORNALEROS DE LAS VENTAS
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Tribuna de Salamanca

Un jornalero que cree mandar es un manijero que crea en el tajo donde trabaja un terrible vacío de poder. El amo es el amo, el manijero es el que maneja y el jornalero el que trabaja para ganar el jornal. Es lo que ha ocurrido en la plaza de Las Ventas que los amos ganan el concurso, y aunque Choperita sea presidente no deja de ser un manijero a jornal. La famosa época del cambio que pretendía poner fin a la gestión compartida y comenzar el camino de la gestión libre se ha tornado, a raíz de una concesión cuanto menos extraña ya que nunca se dieron a conocer las baremaciones de cada una de las empresas licitantes, en problemática. Si bien los primerizos deben tener el beneficio de la duda por cuanto hay más temporadas por delante para demostrar lo que valen. La del 2005 por causa de la desinformación suscitó una polémica sobre un tema tan novedoso y sorprendente como el de los palcos VIP.
Los aficionados a toros no somos trogloditas y por tanto estamos abiertos a los cambios pero observen una cosa, ¿desde un palco VIP se le puede gritar a Ponce "picoooo"? ¿O se le grita mejor desde la solanera? Los VIP que preferentemente suelen ser los usuarios del "Tontódromo", son personajes tan importantes que se la cogen con papel de fumar y lo que para el vulgo es picooo, para ellos es un pedazo de muletazo en redondo cupiendo el AVE (sin gripe) entre Ponce y el toro. ¿Cómo van a ser tan groseros como los de la solanera? Los groseros de la solanera, o gente normal y grosera de otros tendidos gritan "picooo" con todas las de la ley que les protege en su libertad de expresión y en su sabiduría taurina, pasándose por el forro a los pijos de los VIP. Las Ventas ya ha creado otra clase social, están los del sol, la sombra y ahora también los VIP.
Simón Casas que de esto es una mosca cojonera se fue al juzgado y puso una querella por prevaricación a la mesa de contratación y los de la justicia de Madrid no le hicieron caso. Me imagino a Gómez Ballesteros, que manda güevos lo que han cambiado los tiempos, y a Martín Marín soltando resuello. Digo lo de los güevos porque yo he visto a Ballesteros sentado con Mariví Romero y José Antonio Donaire defendiendo la verdad y la pureza del toreo desde su profesión de veterinario, ahora desde la de político lo único que le interesa es lo correcto, no lo verdadero ni lo integro, sino lo correcto, que en política es como la mentira piadosa. Y lo del ex de deportes, ¡qué más da, que da igual, si lo que le importa es estar al lado del poder azul! Pero se ve que alguien se equivocó en los procedimientos y se olvido de que el manual no dice que todos los jueces amigos del ex de los deportes, tengan que pasar por el aro, sino que uno se salió de partida apoyando la tesis de la mosca cojonera y es entonces cuando otro Casas de segundo Estévez se mete con el juez bueno y se monta la pajarraca, porque a ver ¿quién va a confiar así en la justicia? Cuando pasan esas cosas, ¡cuánto me acuerdo de Aparicio el ex de Jerez de la Frontera! ¿Recuerdan aquello que dijo de que la justicia era un cachondeo?
Los polvos del camino trajeron estos lodos y con los dineros de Fidel y de Calderón pusieron de presidente jornalero de Taurovent a José Antonio "Choperita" consumándose así el arribo de la mercadotecnia (lo digo por los VIP y el nuevo marketing) a la plaza más importante del mundo. Que no es que esté mal lo de la gente importante en sus palcos, es que es una atemporalidad que lejos de crear afición lo que hace es minimizar la seriedad de ver la emoción que debe producir la muerte en el ruedo. Claro que esto a los jornaleros les trae sin cuidado porque ellos deben presentarles resultados a los amos Fidel y Calderón y puestos a ello ofrecieron 72 tardes de toros en La plaza más envidiada del mundo, 72 carteles ayunos de calidad, quizás uno o dos confirmen la regla, en los que se incluyeron toreros sin tablas, la mayor parte de ellos recomendados y desconocidos, quizás la pobreza de ganaderías se justifique con lo de la lengua azul, pero no eran toros de los mejores de las camadas. Esta gestión de vulgaridad y ayuna de calidad lleva a la gente, fuera de San Isidro, a no acudir a la plaza viéndose más cemento que nunca en los tendidos. A los jornaleros les da igual si los amos están contentos con los resultados económicos y como los políticos los apoyan, pues España va bien, quiero decir, las Ventas va bien.
Un error que al taurinismo le viene de viejo es, y en esto los amos no han exigido nada al jornalero pareciendo aquellos más listos que este, que la publicidad hecha lo ha sido en el mismo formato que se viene haciendo desde hace quinientos años: En cartelería, por cierto deficiente, y olvidándose de los otros medios de comunicación. Que yo sepa el acuerdo con el medio de Molés no impedía publicitarse en otros mass – media. Y después del fracaso de esta empresa en el plan de publicidad y para rematar la faena les diré que no puedo entender que promocionar la fiesta sea hacer tentaderos en la plaza, aunque también, ni dejar debutar a toreritos y novilleritos desconocidos, sino apostar por los chavales de las escuelas aunque Madrid no sea la plaza idónea para esos niños, pero ¡ya se sabe como son estos jornaleros de lo taurino! Como niños que quien se acuesta con ellos amanece meado.
Visto lo visto y contado, más las denuncias de algunas asociaciones taurinas sobre incumplimientos del arrendamiento, el fallo judicial de irregularidades de concesión a la última época de los Lozano, hacen hoy en día de Las Ventas, una plaza camino a la perdición.

01 marzo 2006

¡MOTRIL, LA INDULTITIS DE LA FIESTA!

¡MOTRIL, LA INDULTITIS DE LA FIESTA!
Por Agustín Hervás

La recién inaugurada plaza de Motril ha nacido enferma, no es que padezca de aluminosis, enfermedad propia del cemento, no, se supone que la construcción es fuerte y aunque pareciera haber empleado una figura retórica no lo he hecho, porque cemento en la grada no se veía pues en su primer día de vida el personal la llenó para gloria del empresario. Solo para el empresario porque en contra de lo que la propaganda política y sus medios van diciendo por ahí, ese día no es para la gloria de la fiesta porque se hayan cortado tropecientas mil orejas, se haya dado una vuelta al ruedo a un toro y a otro se le haya indultado. Más bien la inauguración de esta plaza ha sido para oprobio y vergüenza de la tauromaquia. No voy a entrar en los detalles del festejo solo en tres: que nada de lo que aquí digo es en contra de Sebastián Castella, uno de los pocos toreros que la pasada temporada me ilusionaron y, que en Motril dio una buena dimensión de sus capacidades; que el toro indultado se fue a tablas al final de la faena y que cuando Castella quiso sacarlo al tercio le arreó dos patadas de campeonato. Si porque el toro fuera una maquina embistiendo tiene derecho al indulto en una plaza de tercera, esta no es la fiesta que yo mamé y por lo tanto no es la que quiero. Si porque un toro embista con regularidad a la muleta le llamamos bravo sin tener en cuenta los otros tercios, estamos errando el significado de la bravura a lo que contribuyen ganaderos como Fernando Domecq y los de su sangre... y algunos toreros que se vuelven majaras con tamaña enfermedad que nos inunda como es la que aqueja ya en su nacimiento a la plaza de Motril: La Indultitis. Un termino, - gracias señor Darquea – que manifiesta la pobreza actual del sentido de la fiesta, y que como ya tengo escrito, no beneficia al toro, sino a la publicidad del ganadero, que casi siempre termina dejando morir al animal, y al torero que no tiene que pasar por el calvario de ejercer con sentido su profesión que es la de matador de toros.
Fernando Domecq demuestra con la aceptación de este indulto que no es un buen ganadero, es un excelente ganaduros, porque si Fernando necesita de ese toro numero 9 para padrear, es que no sabe qué sementales tiene en su ganadería. Entiendo, como decía hace años Cebada Gago de uno suyo que se indultó en Algeciras por Emilio Muñoz, que ese toro ha cumplido con su cometido, el de dar fama, popularidad y contratos a su hierro. Y al torero el sello de haber indultado un toro el día de la inauguración de la plaza de Motril. Total propaganda barata para una decadente fiesta que va camino más del esperpento que de la verdad que hay entre la vida y la muerte que es lo que siempre representó la tauromaquia.
Siempre he sostenido la teoría de la volubilidad de las masas. A las masas se las conduce como rebaños de ovejas por el pastor, según soplen los vientos y según la calidad de los pastos. La televisión autonómica de Andalucía dio fe de que José Antonio Campuzano fue el inductor del indulto de ese toro y por lo tanto debe compartir responsabilidad con el presidente de haber incumplido el actual reglamento taurino ya que la Junta aún no ha sancionado el que tiene en proyecto y que será la manga ancha que necesita la Indultitis sea cual sea la categoría de la plaza para elevar lo que ahora calificamos de resfriado común de la fiesta, a rango de cáncer.
El otro colaborador necesario para el oprobio fue Castella, que Dios cargue en su conciencia el mal que ha ocasionado, creyendo, sirva esto de eximente, que el indulto beneficia a esta yacente fiesta. Nada hubiera ocurrido si el francés hubiese matado el toro, digo nada de orden publico que siempre es la excusa de los presidentes, al contrario se le hubiese empezado a considerar no solo como un matador de toros corriente y moliente, sino que además hubiese demostrado su afición. Porque digan conmigo que es difícil encontrar a un torero que sea buen aficionado. De ser así el caso esta fiesta sería otra.
Quiero pues bajo el ejemplo de lo que ocurrió en Motril. Un ejemplo televisado. Advertir a Evangelina Naranjo, consejera de Gobernación de la Junta de Andalucía y a José Antonio Soriano, motor del nuevo reglamento taurino andaluz, que de no parar esta enfermedad pasarán a la historia como los políticos que cambiaron los designios de la tauromaquia y que si no hay más remedio por las presiones a las que estén sometidos, que solo se indulte en plazas de primera y segunda, porque los verdaderos cánceres comienza en órganos de tercera categoría y cuando llegan a los de segunda ya es imposible parar que llegue al de primera y luego... luego que venga la muerte porque a la fiesta ya no hay quien la indulte.